La poesía es conmemoración y celebración, luz y oscuridad, infierno y paraíso. A partir de ella se puede reivindicar cualquier sentimiento, bandera o tribulación. Sus temáticas universales son cíclicas, pues el ser humano mantiene las mismas pasiones siempre: el amor, la locura, la guerra, el desencanto, la existencia en términos generales. Es por eso que cuando nos referimos a la paz necesariamente debemos mencionar la guerra, pues la primera es consecuencia de la segunda.
En este primer especial de El Escarabajo hemos recopilado poemas que celebran a la paz y que, por tanto, recuerdan a la guerra o a los inicios de una lucha que finalizó con los Acuerdos de Paz. En definitiva, otras guerras se mantienen vivas desde entonces, pero el solo hecho de que ya no corriese la sangre entre hermanos y que podamos vivir en una democracia donde todas las ideologías políticas tienen representación es suficiente motivo para celebrar la paz.
Es por eso que no podemos validar la tesis de que tanto la guerra como los Acuerdos de Paz fueron una farsa. Es por eso que desde la poesía celebramos y reivindicamos la fecha del 16 de enero de 1992 como un verdadero parteaguas de nuestra historia que nos permite, aún con todas las falencias de nuestro sistema político, vivir en democracia.
Celebramos la paz con una muestra de destacados poetas de distintas generaciones, con textos cuyo hilo conductor lo constituye la paz como consecuencia de la guerra, por lo que en estos poemas el lector encontrará desde textos que se refieren a la lucha propiamente dicha, pasando por otros que se refieren a la guerra pero con el anhelo permanente de alcanzar la paz, hasta llegar a poemas que se refieren plenamente a la vida bajo el amparo de la paz conquistada en 1992. Distintas visiones, distintas voces, pero todas ellas otorgándole la importancia que se merece la consecución de la paz como producto de la cruenta guerra que padecimos.
En este especial, encontraremos poetas fundadores de la corriente político-social de la poesía, como Pedro Geoffroy Rivas y Oswaldo Escobar Velado, incluyendo poetas contemporáneos que tuvieron un protagonismo más directo en la lucha social como reflejo de su obra, como Matilde Elena López y Roque Dalton. Nacido en los sesenta, Jorge Ávalos, poeta con oficio y profundidad, también participa en esta muestra.
Por supuesto, no podían faltar los poetas de la Generación de los 80, entre ellos David Morales, Otoniel Guevara, Aída Párraga y Luis Alvarenga. La muestra se ve enriquecida por la voz de autores que se han caracterizado por cuidar el equilibrio entre la forma y el fondo, de manera tal que aun tratándose de temáticas que suelen amplificarse en detrimento del cuido formal, sus textos son destellos de luz en la oscuridad de la emoción. Alfonso Kijadurías, David Escobar Galindo y André Cruchaga representan esta línea de discurso poético.
La muestra también incluye textos de poetas que de una u otra manera vivieron los últimos coletazos de la guerra, poetas jóvenes de los 90 que vivieron los primeros años de la paz ─Alfonso Fajardo, Carlos Clará, William Alfaro, Susana Reyes, Rainier Alfaro Bautista, Noé Lima, Erick Chávez Salguero y Juan Carlos Cárcamo─, finalizando con representantes de las dos más recientes generaciones de poetas, los nacidos en los años ochenta y noventa, que han surgido, destacado o publicado en el nuevo siglo; poetas importantes de sus respectivas promociones, como Vladimir Amaya, Luis Borja, Lauri García Dueñas, Rebeca Henríquez, Francisca Alfaro y Josué Andrés Moz.
El Escarabajo se ha esforzado por que esta entrega tenga alta calidad poética, pues consideramos que uno de los errores del pasado siempre consistió en preponderar el canto y la consigna por sobre el cuidado estético del poema. Esperamos que con esta selección hayamos logrado nuestro objetivo. En los años venideros seguramente habrá muchos más poetas que, de una u otra manera, se refieran a las temáticas relativas a las luchas, la resistencia y el antifascismo. Después de todo la poesía es también reflejo de la realidad circundante.
Celebremos, pues, este 16 de enero 2021, fecha de la firma de los Acuerdos de Paz con esta poesía, que nos habla del pasado pensando en el futuro; con esta poesía del presente que quiere evitar que se repita el pasado.
¡Felicitaciones, poetas, nada más alegre que celebrar la continuidad y persistencia de la creación! Ustedes sabrán hacer de este espacio todo un referente, lo puedo asegurar. Abrazos
Pero cuándo hay impunidad, no hay paz. Y eso es algo que todos sabemos y sentimos con todo el dolor histórico por las memorias .
Interesante. Ojalà para el próximo nùmero investiguen màs sobre los poetas que tienen no solo poesìa antifascista, sino con mucha calidad estètica, pero no pertenecen ni han pertenecido a la aristocracia poètica de este pais